jueves, 28 de julio de 2011

"Drogarse con un vaso de agua"



Estos días ando leyendo y releyendo un librito llamado "El Deseo, según Gilles Deleuze" escrito por Maite Larrauri. Es sencillo de leer y de entender, y no se si es por el momento , pero aporta saberes valiosísimos. Deleuze explica que lo dificil no es conseguir lo que se desea, sino que lo díficil es desear. Y eso de desear es lo que debería mover el mundo, pero lejos de imposturas como la publicidad y otras presiones sociales, y lejos de imposturas como un identidad prefijada , a la cual debemos dar sentido. Lo que se desea, si está  al margen de estas imposiciones es lo que nos conviene, para realizarnos , para desplegar toda la potencia que llevamos dentro. Lo que nos conviene, es lo que da a nuestra vida alegría y crecimiento. Pero no uno , sin lo otro. "Drogarse con un vaso de agua", llegar a sentirse de esa manera, pero sin substancias insanas, ni actividades nocivas... El mundo en que vivimos juega con ese deseo, y esto es lo que genera esta "esquizofrenia" que vivimos, acabamos deseando ideas impuestas, contextos impuestos (coche=chica rubia, amigos, fiesta, triunfo...), que en vez de hacernos crecer nos pierden o nos limitan. Somos más que eso. Por esto explican que hay que dejar de dar importancia a "ser", para poder  "devenir", no pensar donde llegamos , sino el camino. Desdibujar el contorno que nos define. Desplegarse en el territorio, sólo buscando puntos necesarios (punto de agua, de habitación , de asamblea...). Esto está enlazado con la idea del rizoma, Deleuze viene a decirnos que "somos hierba", y porque la hierba, es horizontal, y se expande de manera rizomática, cualquier brizna de hierba  puede dar lugar a más hierba, crecer y desplegarse, sin conocer límite. Contrario a la idea del árbol, vertical, e inmóvil. 







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